Historias mínimas.
La reina perfecta y La arquitectura del océano, de Inés Garland.
Inés Garland es una escritora argentina de novelas y libros de cuentos para adultos, jóvenes y niños cuyos libros fueron traducidos a distintos idiomas. Además, es la primera autora latinoamericana en ganar el Premio Deutscher Jugendliteraturpreis por su novela Piedra, papel o tijera.
Garland en sus relatos demuestra su gran conocimiento sobre temas como el amor, el desamor, la fantasia, el deseo y la sensibilidad. Con astucia y elegancia, utilizando una descripción muy puntillosa, a través de sus relatos cuenta historias mínimas donde los detalles pueden cambiarlo todo. También, en algunos de sus textos utiliza diálogos, lo cual le da mucha más dinámica al relato y lo hace más real.
Trabaja con muchos personajes femeninos y en algunas de estas pequeñas historias como “El remolino”, incluida en el libro premiado en 2005 por el Fondo Nacional de las Artes “Una reina perfecta”, la misma autora hace referencia a sí misma estableciendo algunas coincidencias con sus vivencias reales.
En este relato y en otros más como “Lo que me hiciste” la autora utiliza como narradoras a niñas que cuentan cómo es estar al cuidado de una empleada perversa. Hacer foco en una voz infantil, es decir, hacernos llegar el relato desde la voz de un niño o niña provoca que los hechos se relaten con cierta naturalidad que una voz adulta tal vez no lo provoca.
Garland también invade algunas de sus historias con sensaciones como la tristeza, la soledad y el fracaso. Tal es el caso de “Azul turquesa”, un cuento breve que relata la historia de un viaje entre madre e hija el cual está lleno de emociones y sentimientos porque demuestra la inocencia infantil y la pena que los adultos cargan, en este relato la niña, por ejemplo, extraña a su padre, el cual no está en ese viaje.
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